
Fotógrafa y activista ecuatoriana. El cariño por el equipo se inicia cuando su abuelo César, profesor de cálculo en la Universidad Central, dictaba clase a los primeros jugadores de la Liga Deportiva Universitaria de Quito. Entonces él llevaba a su padre Marcelo a los partidos y, a su vez, su padre la llevaba a ella. Una historia familiar que se convirtió en tradición.