El espacio es una construcción social, no puede ser entendido fuera de la sociedad que lo produce. Su significado es producido por ella, y él a su vez, transforma las relaciones sociales.
Espacio urbano, espacio social.
Es desde el reconocimiento de esta relación bi-direccional entre espacio público y sociedad, que la División Espacios Públicos, Hábitat y Edificaciones ha abordado e implementado el modelo de gestión para estos espacios, y en particular para los parques: un modelo de gestión que, sin borrar la huella que delata la historia de la ciudad y de su colectivo social, de respuesta a los requerimientos y pautas culturales contemporáneas. Una gestión que permita conjugar los intereses de los diversos actores y usuarios vinculados a estos espacios, y condensar en las intervenciones, el resultado de su participación. Una gestión que facilite la coordinación y articulación de las múltiples actuaciones y actividades que sobre los mismos se realizan.
La gestión integrada: clave de la nueva política de gestión de espacios públicos.
Como ha dicho Jordi Borja, el espacio público supone “dominio público, uso social colectivo y multifuncionalidad” . A partir de este lineamiento compartido, se implementa un modelo de gestión que atienda conjuntamente dichos aspectos, es decir, la promoción de su uso y goce democrático, el fomento de la integración social, y el logro de un espacio físico de calidad.
Un modelo “integrador”, en el que se interrelacionen los diferentes componentes, actores y actuaciones. Que permita atender tanto la dotación, renovación, y mantenimiento de sus monumentos, especies vegetales, y en general de su infraestructura y equipamiento, como su cuidado, vigilancia y seguridad; e incluya asimismo, la gestión de las diferentes actividades —deportivas, recreativas y culturales— que en él se desarrollen.
Nuevos instrumentos de gestión. Llevar adelante la gestión de los espacios públicos de un modo integral, ha implicado recurrir a nuevos instrumentos, así como a la implementación de ámbitos para la coordinación, institucional e interinstitucional, para la cooperación público–privada y para la participación de la comunidad. En este marco, se formaliza la participación social mediante la creación de Comisiones Especiales; y se crean la figura del Coordinador General de Gestión de Parques, como coordinador de las diferentes actuaciones y actividades, y como articulador de los diversos actores vinculados al parque; el Programa de Vigilancia y el cuerpo de Cuida-parques, que ponen énfasis en la actividad preventiva y educativa.
Impulso a la organización del trabajo con Cooperativas. Para el cumplimiento de estos objetivos se fomenta la conformación y desarrollo de cooperativas de trabajo. Y por tanto, se acompaña uno de los ejes prioritarios de esta Administración: la búsqueda e incorporación de modalidades que permitan diversificar las formas de trabajo, posibilitando la gestación de múltiples experiencias laborales.
Contribución al reequilibrio socio-territorial. En el marco del lineamiento estratégico del Plan de Ordenamiento Territorial de propender al reequilibrio socio- territorial, se han realizado actuaciones tendientes a completar un sistema de espacios verdes coherente y equidistribuido en el territorio, mediante la creación de nuevos espacios. Son ejemplo, el Parque Andalucía, el parque lineal sobre la Rambla Portuaria, y el Parque Cordón Norte; este último, en proceso de construcción.
Resignificar los roles y recuperar la relevancia que los espacios públicos tienen para la estructuración de una ciudad inclusiva y democrática, ha sido pues el punto de partida, y es el desafío para nuestro Montevideo, actual y futuro.
En esta dirección, el acondicionamiento y ejecución de un equipamiento permanente dentro del Parque Rodó para la exposición de muestras fotográficas a cielo abierto —que da cabida a la presente muestra—, se constituye también en testigo de la concreción de esta nueva forma de gestionar el espacio público en Montevideo.