
Eduardo Galeano (a la derecha) con Carlos Monsivais (1938-2010) supieron compartir las estrecheces del campamento zapatista en Chiapas y las pantagruélicas
comilonas en Ciudad de México o Montevideo. Del cronista mexicano le gustaba, en especial, la ironía de hacer pasar el pesimismo por su opuesto, y así lo hace
notar en Patas arriba: la escuela del mundo del revés (Siglo xxi, 1998). S.d., s.f. Fotografía analógica. Autor: S.d. Archivo: Eduardo Galeano – Helena Villagra