DIANA MINES. Autorretrato con trenza de niña, 1988. Fue una noche oscura de un año oscuro. Buscar las dos trenzas cortadas cuando cumplí cinco años, que mi madre había guardado, quitarme la ropa y pegarme una de ellas, fue todo compulsivo. Armar la cámara, el trípode, la lámpara, y hacer varias tomas con y sin trenza, calcular el foco y correr a sentarme cada vez, me volvió a la realidad. Tal vez me salvó la vida. Demoré en mostrarle a alguien esas fotos y aún me da cosa.
Diana Mines
© Diana Mines







