El llanto podrá durar una noche, pero en la mañana vendrá la alegría

Serie con fotografías autorales, otras apropiadas de mi propio álbum de infancia y cartas de mi padre a mi madre.

Mi padre siempre ha estado presente en mi vida. Bueno, no físicamente, pero siempre ha estado presente en los traumas dejados en mi madre, del aborto masculino, en el vacío, en la falta. Y en la falta que dejó en su propia vida.

El trabajo es un intento de reconstrucción, no de lo que viví, sino de lo que vivió. Se convierte en una búsqueda sobre la identidad de mi padre. Lo conoces a través de la vida que tuviste.

Encuentro una historia que se repite muchas veces en el barrio donde sobreviví en América Latina, mi barrio, que -como tantos otros- es el reflejo del gran barrio periférico que es Brasil.

Al cruzar mi infancia y las oscuras calles de mi memoria, encuentro fragmentos de los traumas que dejó el vacío.

Cruzando la noche, acompañado de simbologías y entidades mundanas, reconstruyo y busco comprender ausencias familiares, relaciones, la vida en el margen y cómo eso puede reflejarse y repetirse en la vida adulta.

En en la oscuridad de los caminos internos, cuando la noche se canse, la luz de la mañana brotará tímida. Nunca amanecemos los mismos.

Erick Peres (Porto Alegre, Brasil, 1994)
Fotógrafo, artista visual.
Desde hace cinco años documenta la vida nocturna, donde inició su proceso artístico.
Aborda temas personales como familia, relaciones y vida al margen. En su investigación se apropia de imágenes personales, álbumes de familia, documentos y textos, creando así crónicas marginales.