La escuela nuestra, es decir la escuela del turno matutino cumplió los cien años en el 95'. Cuando cumplimos los 100 años la escuela hizo un trabajo con la comunidad, donde se formaron distintos grupos de trabajo con las fuerzas vivas del barrio. Y la Secretaría de la escuela lo que hizo fue buscar en los archivos el alumno uno, o sea la matrícula del primero que vino a la escuela. Lo que hicimos fue invitar a ex alumnos de la escuela y regalarles una fotocopia de la primera matrícula. Incluso la gente mayor se quedó muy emocionada porque no se imaginaba que en la escuela existían esos archivos.
Es una escuela muy cálida para mi y muy comprometida con nuestra vocación. Es muy vocacional el trabajo del maestro. Tenemos también una buena biblioteca, tanto del maestro, del docente, como de los niños. Hay muy buen material didáctico. Tenemos apoyo del Club Atlético Peñarol que, todos los años, en setiembre, cuando es el cumpleaños de ellos vienen a la escuela. Te llaman antes y preguntan qué precisa la escuela. La escuela tiene filmadora, tiene televisor, tiene video, tiene computadoras, todo donado por Peñarol. Esa es una ventaja. A la Biblioteca le pusimos el nombre de una compañera que falleció: Myrtha Conti. Y como yo la conocí, trato de ir cuando van a visitar la Biblioteca y les cuento quién era Myrtha, porque es más vivencial para ellos. Hicimos más o menos un resumen de su vida y lo pusimos en la Biblioteca para que ellos lean. La familia de ella nos dona todos los años libros para la escuela.
junio de 2003.